El mago muestra tres pañuelos de seda manchados y los coloca en una caja de jabón (o simplemente en una bolsa de papel hecha de periódico). Ponga un poco de líquido en la caja y dice que la caja de detergente se utilizará como una “lavadora mágica”. Un momento después el mago retira los tres pañuelos completamente blancos y perfectamente limpios.

 Finalmente, el mago la abre por completo y abre la caja para demostrar que no hay nada escondido dentro.

 ¡Un clásico atemporal! 
• Los distintos pañuelos de seda blancos y teñidos miden 45 cm de cada lado y para ello se proporcionan los artilugios de plástico necesarios. 

• También proporcionamos una bonita caja, hecha especialmente para este fin, que se puede abrir completamente. Se puede reutilizar varias veces, pero si se daña, puedes comprar recambios. 

• No se proporciona el dispositivo para verter el líquido (un clásico vaso de leche o una jarra mágica son complementos perfectos para esta rutina, pero no son necesarios para conseguir el efecto).